Pintadas mamarrachas

Si uno llega a Zamora desde Valladolid y quiere ir al centro, lo que se topa es, en una fachada posterior y al lado de la vista de un hermoso edificio modernista de principios del siglo XX, con una pintada mamarracha en lo alto, que no quiere uno ni imaginar por dónde se han subido para hacerla. Ahí la tienen ustedes.

Lo que se ve si se entra a Zamora desde Valladolid

A continuación pueden ver como han dejado la fachada de nuestra antigua casa en la calle Traviesa, cercana a la anterior vista.

Pintadas en la Calle Traviesa de Zamora

España entera está llena de lo que denominan graffitis, pero que no son más que pintadas,  de mal gusto ni solicitadas, ni encargadas. 

Es producto de la mala educación. Por un lado, está la falta de urbanidad y del sentido de convivencia. Por otro estaría el menosprecio a la autoridad y a la disciplina en la formación pedagógica actual. Su motivación es artística, dicen los grafiteros, pero me parece que son, más bien, actos de rebeldía blandita: la aventura de experimentar el peligro de cometer un ilícito leve. 

Es un atentado visual permanente y a los indeseables que las realizan les da igual dónde hacerlas. Es también atentar contra el patrimonio; el general del común y el legítimo de los propietarios particulares. Las autoridades supongo que hacen lo que pueden, o eso dicen. En todo caso, se gastan presupuestos públicos en las limpiezas de la paredes, que a casi nunca quedan como estaban antes de las pintadas. 

Es insólito. Ésto, en otros países, no se ve.