domingo, 28 de febrero de 2021

Miguel Ramos Carrión en las exposiciones nacionales de pintura del siglo XIX

A finales de los años 80 y en la década de los 90 del pasado siglo se produjo un cierto proceso de valoración de la pintura histórica del siglo XIX a la que cobré bastante afición.

Además, supongo, de algunas visitas al antiguo Casón del Buen Retiro en el que se encontraban, más que expuestas , almacenadas algunas de las obras más destacados de este tipo de pintura, dos hitos fundamentales en esa afición fueron – ya no recuerdo cual pudo ser el orden – el libro Imagen histórica de España (1850-1900) de Carlos Reyero, editado por Espasa Calpe; y la gran exposición La pintura de historia del siglo XIX, celebrada en 1992 en el Museo Español de Arte Contemporáneo de la Ciudad Universitaria, (hoy Museo de Traje), exposición organizada por el Museo del Prado bajo la dirección técnica de José Luis Díez, Jefe del departamento de pintura del siglo XIX de dicho museo.





En esta exposición se reunieron, traídos desde diversos museos e instituciones (diputaciones, ayuntamientos, etc.) de toda España, un importante número de los cuadros más relevantes de este género pictórico. Cuadros académicos, monumentales y de enormes tamaños que muchos de ellos ya no se verían expuestos juntos en el futuro.

Cuadros que, de múltiples formas, habían alumbrado nuestra infancia y adolescencia, visualizando la historia de España o sus relatos en el siglo XIX; momento en que, después de tantos siglos se estaba construyendo, entre liberales y conservadores, revoluciones y guerras carlistas y los carruseles de gobierno de la restauración, la nación española y su supuesta identidad histórica.

Por esas fechas y al hilo de la exposición mencionada y otras, hubo planes para trasladar muchos de estos cuadros desde sus lugares de depósito desperdigados muchos de ellos por toda España y centralizar la exposición de los mismos  en el Museo del Prado. Lo que nunca llegó a realizarse.


Seguimiento periodístico de las Exposiciones Nacionales de Pintura del siglo XIX


Una de las cosas que más llamó mi atención fue el revuelo y el éxito social y oficial que este tipo de pintura adquirió, a través de las Exposiciones Nacionales de Pintura realizadas cada año. Exposiciones a las que las revistas de todo tipo que se editaban en la segunda mitad del siglo XIX enviaban corresponsales que realizaban reseñas; críticas académicas y críticas históricas; serias y cómicas y en prosa y en verso.

Estas poesías satíricas y humorísticas dedicadas a los cuadro, eran mis preferidas Sin embargo, como mucha información y mucha literatura menor del siglo XIX, no se encuentra debidamente recopilada y estudiada y lo que ha llegado hasta nosotros es poco y fragmentario.


Miguel Ramos Carrión


Soy paisano de Miguel Ramos Carrión, ya que nací en Zamora unos 50 años después de su fallecimiento en 1915 , y me gustaría traer aquí algunas de las composiciones poéticas humorística que el autor zamorano dedico a algunos de los cuadros en  exposiciones nacionales. 
Miguel Ramos Carrión escribió la Revista Cómica de la exposición de 1871, y en ella se encuentran los versos que corresponden a los cuadros siguientes. 

El primero fue El último día de Sagunto de Francisco Domingo Marqués , cuadro de 86 x 137 centímetros pintado gracias a una  pensión de la Diputación Provincial de Valencia para completar sus estudios en Roma. En la Ciudad Eterna pintó el obligado cuadro de historia, en el que alude a la destrucción de Sagunto, ciudad aliada de Roma, en el año 219 a.C., tras ocho meses de asedio por parte de las tropas cartaginesas dirigidas por Aníbal.


El último día de Sagunto
Francisco Domínguez Marqués

Es una abigarrada composición de saguntinos feneciendo a fuego, hierro y espada, que prefirieron lanzarse  al fuego que devoraba la ciudad ante que someterse al invasor. Quien parece ser Aníbal irrumpe por la derecha en un carro tirado por dos caballos encabritados que aplastan a su paso los cuerpos de los saguntinos.

Un barullo compositivo que, por otra parte, es una muestra de cómo la pintura oficial quería representar el valor de nuestros antepasados íberos y considerarlos como protoespañoles.

Miguel Ramos Carrión lo despachaba con estos versos

"Figuras más de un millar
sin forma y sin acabar
ha dejado el artista.
Pero se le debe dar
el premio de colorista."

El otro cuadro glosado fue el conocido como La muerte de Séneca del pintor madrileño Manuel Domínguez Sánchez. El cuadro, (de gran tamaño: de 2,70  x 4,50 metros), recoge la escena posterior a la muerte de Séneca, después de abrirse las venas en la bañera  sus amigos, poseídos de dolor, juran odio a Nerón que había  decretado la muerte de su maestro.

 


En él sobresale la cabeza de Séneca en escorzo con la cabeza  desde atrás en primer plano y su brazo fuera de la bañera extendido y yerto. Un discípulo se inclina hacia él filósofo llorando y hay muchas más figuras. Ramos Carrión dice:

"Dicen que están sus amigos
poseídos del dolor
muy bien lo expresa el de en medio
pero los otros cuatro no.
En resumen, hay figuras
que no tienen expresión,
pero es un cuadro hermosísismo
que dara fama al autor."

Ramos Carrión tiene calle, teatro, monumento y placa conmemorativa en la casa en que nació en Zamora. 



Casa natal de Ramos Carrión en Zamora

No estaría de más que alguna benéfica institución de la provincia patrocinara y promoviera la publicación de su biografía - inexistente en le momento actual -  y de su obra que como periodista, poeta y libretista de operas, zarzuelas y género chico fue de las más importantes del siglo XIX.

viernes, 26 de febrero de 2021

A este febrero que se equivocó... y Señor que me has perdido las gafas de José Antonio Muñoz Rojas.

Volvemos a incluir en poesía y ciencia, no una, sino dos composiciones. La primera nos viene sugerida por esta repentina subida de temperaturas en febrero, que seguro que no traerá nada bueno al campo. El soneto A este febrero, que se equivocó y se vistió de abril en 1966 de José Antonio Muñoz Rojas expresa este temor de una forma vívida y apegada a la tierra. Lo malo es que lo que antes era esporádico, cosas de refranes, ahora parece que se está haciendo habitual y es muestra del calentamiento global. ¡A ver si somos capaces de enderezarlo! 


José Antonio Muñoz Rojas


Y, en esas, recordé Señor que me has perdido las gafas, entrañable poema dedicado a las útiles y domésticas gafas – el artefacto surgido de la óptica más popular y difundido a lo largo de la historia – que siempre andamos perdiendo los de vista cansada y es obra, también, del insigne poeta malagueño que nos dejó en 2009.

A este febrero, que se equivocó y se vistió de abril en 1966

Qué disparate, Abril se ha equivocado,
y tomando la posta de febrero
y diciéndose flor para qué os quiero,
a Marzo a la torera se ha saltado.

Y un alboroto por el campo ha armado
de yemas sin sazón, tramas sin fuero,
la violeta diciéndose me muero,
apenas el color recién morado.

No me abrilees Febrero a estas alturas,
que luego viene Marzo con su yelo
y nos hace la pascua antes de fecha.

Tú con las tuyas y él con sus diabluras.
Y donde dice vega pone duelo
y nos deja a dos palmos de cosecha.

Señor que me has perdido las gafas

Señor que me has perdido las gafas,
por qué no me las encuentras?
Me paso la vida buscándomelas
y tú siempre perdiéndomelas,
me has traído al mundo para esto,
para pasarme la vida buscando unas gafas,
que siempre están perdiéndoseme?
Para que aparezca este tonto
que está siempre perdiendo sus gafas,
porque tú eres, Señor, el que me las pierdes
y me haces ir por la vida a trompicones,
y nos das los ojos y nos pierdes las gafas,
y así vamos por el mundo con unas gafas
que nos pierdes y unos ojos que nos das,
dando trompicones, buscando unas gafas
que nos pierdes y unos ojos que no nos sirven.
Y no vemos, Señor, no vemos,
no vemos Señor.

José Antonio Muñoz Rojas. (Antequera-Málaga, 1909 – Mollina-Málaga, 2009).

Ver más en poesía y ciencia o
en el blog La alegría de las musas 


lunes, 22 de febrero de 2021

Crepuscule with Nellie. Thelonius Monk y John Coltrane.

Me da por volver a escuchar el doble LP "The Gentle Side of John Coltrane" (1), recopilatorio de grabaciones tranquilas,  en forma de baladas del gran saxo tenor que fue John Coltrane. Mis preferidas. Algunas son composiciones propias pero la mayoría son versiones eternas de standards como Nancy, What's New, Soul Eyes, Lush Life, My One and Only Love, In a Sentimental Mood....




Lo que me llevó a otro LP también doble, que con el título "Monk/Trane", (2), recoge grabaciones de Thelonius Monk de 1957 y 1958 en las que participó John Coltrane. En el se encuentran siete temas grabados el 26 de junio de 1957. Son 4 composiciones de Monk: Well, You Needn't; Off Minor (2 tomas); Epistrophy (2 tomas) y Crepuscule with Nellie y la última es una versión del himno religioso Abide With Me en la que sólo tocan los vientos: Ray Copeland (trompeta), Gigi Gryce (saxo alto) y Coleman Hawkins y John Coltrane (saxo tenor).




Precisamente ese día en que se grabaron los temas anteriores este buzo cumplía 1 año. No sé si fue en San Vitero - pueblo de la comarca de Aliste - en que mis padres eran maestros o si, por esas fechas, nos habríamos ido ya de vacaciones a Zamora a pasar el verano con mis abuelos maternos.

Nos centramos en el tema Crepuscule With Nellie que Thelonius Monk dedicó a su esposa Nellie, sometida en esas fechas a una operación de tiroides. El tema es tan raro y tirante como brillante - "made in Monk"; con un resultado que da lugar a un sonido inquietante y muy moderno. Comienza el piano solo al que se le unen Wilbur Bare  al contrabajo y Art Blakey a la batería, interpretando la melodía completa, que repiten una vez. Después se añaden todos los instrumentos de que tocan todos a la vez y al unísono con la melodía ya conocida al piano. Así hasta el final.

Imaginémoslo interpretado en directo; y el espectáculo de Thelonius Monk con sus trajes de rayas, gafas de sol eternas, anillazos y boinas o gorros kufi. Como pueden ver  en la siguiente interpretación de Blue Monk.

La creación del más osado jazz del siglo XX el día de mi primer cumpleaños. También, fantasmas del pasado. En todo caso no puedo por menos que contarlo en este blog de forma que queden unidos el jazz con el tiempo pasado y presente. Y Aliste en tierras zamoranas con el bebop de Thelonius Monk y John Coltrane de los años cincuenta. 


(1) ABC Impulse - 23.06017 F y 23.96017 G - Distribuido por Moviplay. 1976.
(2) Milestone - S66.055 2LP's. 1973. Distribuiido poe Hispavox 1981.

martes, 16 de febrero de 2021

Menú largo en la zarzuela Los lobos marinos

Brujuleando por otros temas, alrededor del gran autor zamorano que fue Miguel Ramos Carrión, me encuentro con esta pintoresca poesía que describe con mucha gracia un largo y exagerado menú. Con un final tremendo.



Miguel Ramos Carrión
(Caricaturizado por Tovar. Wikipedia)

Pertenece a la zarzuela Los lobos marinos, con música de Ruperto Chapí y libreto del mencionado Ramos Carrión Vital Aza, cuyo estreno se verificó en teatro Apolo el 17 de mayo de 1887 con un éxito resonante. Se trataba de una obra cómica que, (según las crónicas), "tenía muchísima gracia" y que hizo las delicias del público durante dos temporadas. 

El poema lo interpretaba - siento no haber encontrado la música - "el famoso quinteto de los cómicos" y dice así:

¡Arroz con almejitas!
¡Y unos esparraguitos!
¡Y unas alcachofitas!
¡Y unos langostinitos!
¡Cangrejos y salmón!
¡Merluza y salchichón!

¡Pechugas mantecosas
de pavo o de capón!
¡Chuletas deliciosas!
¡Chorizos y jamón!
¡No hablemos de esas cosas
en esta situación!
¡Jamón! ¡Salmón! ¡Salchichón!
¡De Vich y de Lyon!

¡Dichoso el que se muere
de una indigestión!

En efecto, ¡un final tremendo!


viernes, 12 de febrero de 2021

Empresas que esparcen su humanismo y dulzura

 El pasado  lunes tuve la fortuna de leer la columna de título Dulzarrona escrita por Marta Sanz en EL PAÍS. Eran palabras y razones en las que me reconocí y, con toda sinceridad, sentí una admiración y un respeto enormes porque vi reflejados mis pensamientos y sentimientos de una forma cristalina, de forma que – aunque reconozco que jamás sería capaz – era el artículo que en este momento me gustaría haber escrito yo.

En un apresurado resumen, (que no sustituye el original de Marta Sanz, que no deben dejar de leer) la columna trata del fariseísmo contemporáneo de esta sociedad en que las empresas y, también, los medios de comunicación se han arrojado a un sentimentalismo seudolírico y dulzarrón en que aparecen los tópicos buenistas que más de moda están: “cuidamos (cuidemos) el medio ambiente”, “eres nuestro amigo y lo que más importa”, “lo hacemos por ti”… y otras zarandajas que, sinceramente, resultan repulsivas.

Porque en el caso de los medios de comunicación la cuestión de que así hay más audiencia; y en el caso de las empresas siguen haciendo lo de siempre y a lo suyo. Parecerían haber desaparecido conceptos del léxico empresarial tales como saldo, beneficio, cuentas, plusvalías…etc. Pero no es cierto: lo más importante siguen siendo sus ERES y aumentar el beneficio.




Aporto un ejemplo adicional. Hay un nuevo banco– que proviene del destrozo de las cajas de ahorro y sus posteriores requetefusiones – que aún es público y que ahora ha cogido como eslogan “Humanismo digital”; cartelitos a la moderna en colores ocres y suaves  repletos de melonadas que les ahorro. Es BANKIA.

Les cuento lo que es – también a la vez – el “humanismo digital” de BANKIA o por sus obras los conoceréis.

Este BANKIA, en una cuenta de una Comunidad de propietarios de 4 viviendas y un local, (cuenta que soporta, ¡atención, la Friolera de 12 pagos al año de luz de portal y dos cuotas del seguro de la comunidad!), ha pasado de cobrar en “comisiones, gastos y otros” 31,50 euros anuales en 2017 a cobrar 137,71 en 2020. Con lo que ahora mismo, pagamos más al año en comisiones bancarias que en la luz del portal y escaleras. ¿qué les parece?

De donde se deduce que “Humanismo digital” debe querer decir, también, cuadruplicar las comisiones en 3 años, (4,37 veces para ser exactos). O visto de otra forma, en 2020 hemos pagado un 337% más que en 2017.

Francamente, no sé si este lirismo empresarial del “Humanismo digital” compensa.

jueves, 11 de febrero de 2021

Taquicardia y El virus del ordenador. Vainica Doble.

Hoy nos encontramos con esa hermana melliza de la poesía que son las letras de las canciones populares. Y no podemos discernir quien es la autora individual de la letra, por lo que podríamos asignarla a un ente de nombre de pila Vainica y de apellido Doble; es decir: Gloria van Aerssen y Carmen Santonja, mis queridas Vainica Doble




Además traemos  dos composiciones. La breve  Taquicardia que presenta una visión entre aprensiva e insinuante de la cardiología y El virus del ordenador, de cuyas maldades ya nos avisaba Vainica Doble en 1997, hace 14 años; ¡unas pioneras!

Taquicardia

Doctor,
hágame un electrocardiograma
porque tengo delicado el corazón.

¡Ay qué palpitación!
Cómo late, late, late mi corazón.
Sístole diástole...

¿Dónde está ese médico de guardia
para que me cure esta taquicardia?


El Virus Del Ordenador

Confieso que soy la causa de un lío infernal,
confieso que soy un riesgo internacional.
Trabajo a nivel de redes de alcance mundial,
mi radio de acción es el universo,
procedo a traición, porque soy perverso;
mi caldo de cultivo
está en los electrones negativos.

Confieso que soy pirata del mundo industrial,
confieso que soy espía internacional.
Por ordenador practico mi amor por el mal.
Por ordenador me meto en su casa;
por ordenador en la propia NASA;
mi caldo de cultivo
está en los electrones negativos.

Estribillo

Soy el virus del ordenador,
soy el virus del ordenador,
un germen sin conciencia,
sin clemencia, ni pudor;
soy la oveja más negra de la ciencia;
porque soy un ángel exterminador,
soy el virus del ordenador,
un error de la ciencia.

¡Qué no haré cuando sea mayor,
si aún estoy en la adolescencia!
......

Confieso que estoy tramando el fantástico plan
de hundir a la vez el Pentágono y el Bundesbank.
Y no cejaré hasta que ponga todo al revés,
el sur en el norte el norte abajo
que "la cumbre" en pleno se vaya al carajo,
si no hallo en el camino
al pérfido antivirus asesino.

Estribillo
......

Vainica Doble. (Gloria van Aerssen, (1932-2015); y Carmen Santonja (1934-2000)).

Ver más en  poesía y ciencia o
en el blog La alegría de las musas 2