lunes, 8 de marzo de 2010

Es la industria, estúpidos.


"La Máquina", simbolo de la industria. En el hall de la E.T.S.I.Industriales de Madrid

Según informa Le Monde, la semana pasada el presidente francés Sarkozy ha enunciado un ambicioso plan para fortalecer la industria. Con una previsión de 6.500 millones de euros pretende, mediante diversas medidas, relanzar la industria francesa y volverla a poner en su lugar después, según él, de varios decenios de medidas anti-industria, coronadas por la implantación de la semana laboral de 35 horas. Francia no puede ser, dice Sarkozy el país más desindustrializado de Europa. En Francia, sólo un 16% del PIB proviene de la industria (frente a un 30 % en Alemania), de dónde proviene el déficit de su balanza comercial.

Desde luego la recuperación de la industria parece una pieza angular de su pensamiento político y económico.

Je lis parfois des interrogations sur ma politique économique : est-elle libérale ? Est-elle interventionniste ? Protectionniste ? A ceux qui s'interrogent, je livre aujourd'hui un principe fondateur de toute la politique que j'ai voulu mener, dès avant 2007, et plus encore depuis : la priorité absolue donnée au redressement de l'industrie française", a-t-il précisé.

Creo que Sarkozy tiene razón en plantear como prioridad absoluta el relanzamiento de la industria. Por comparación la industria produce unos valores añadidos superiores a otras actividades, constituye el origen de las innovaciones más valiosas y duraderas y da lugar a relaciones económicas más estables con proveedores y a la creación de nuevos servicios especializados.

Que la industria constituye una fuente de riqueza superior y más duradera que otras actuaciones económicas ha sido bien conocido en determinadas épocas y situaciones. Recordemos a diversos monarcas españoles iniciando actuaciones industriales, hasta entonces inexistentes: fábricas de paños, de cerámicas…etc. , imitando lo que ya habían hecho anteriormente otros monarcas de otros países. En el desarrollo económico de los últimos doscientos años, los países más punteros y de mayor bienestar, han sido aquellos que eran superiores en materia de industria: Gran Bretaña, Francia, Alemania, Estados Unidos, Japón. En el momento actual, algunas de estas sociedades han sucumbido parcialmente al espejismo de que sólo con servicios, (que califican de “avanzados”), se puede seguir a la cabeza de la economía mundial. Ello no es así, y ya vemos ahora mismo como nuevos países: China, Corea.. , que consideran la industria como la primera actividad económica a apoyar, (es la industria, estúpidos), están empezando a tomar el relevo y a ocupar los lugares de cabeza de las economías.

En España, en que compartimos con Francia el bajo componente en el PIB de la industria, para tratar de salir de la crisis económica, probablemente, se debería iniciar una reflexión semejante a la que Sarkozy ha realizado en Francia. Esa sí que sería una de las reformas estructurales que necesitaríamos. Me temo que no se hará y al buzo se le ponen los dientes largos. Nuestro nivel menos ambicioso y más gallináceo, en el sentido de tener menos vuelo, sólo ha dado de sí, hasta el momento, iniciativas de consenso tales como las de arreglar, eso sí, a nivel nacional, el parqué ó terrazo de todas las casas de España. ¡Ah! y, de paso, pintar el pasillo.

Para finalizar, para consuelo de todos vosotros, que odiáis los teléfonos, (y a las empresas que os castigan con ello), esos de: .. si quiere información sobre guisantes, marque 1; si quiere información sobre turrón, marque 2;….; si quiere que le atienda un operador, espere….; os muestro este genial chiste de Rodera. Mejor que un editorial. Lo tenéis todos los días en el diario gratuito ADN.



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