Si se muere Paco de Lucía, no se puede pensar en
escribir una entrada en la perplejidad dedicada a Indriadason, el nuevo autor
policiaco preferido; ni escuchar Las chicas de la Cruza Roja. Tampoco se puede corregir
la entrada de La alegría de las musas del próximo martes sobre La declaración matemática
de Manuel Ossorio y Bernard.
Si se muere Paco de Lucía en este día de final de
febrero en que sale el sol y después cae un chaparrón y Madrid se vuelve gris
otra vez y este podría ser el día en que la música murió. Solo, con la guitarra
en el escenario: juncal, sereno. Si se muere Paco de Lucía lloran los
canasteros y el Barrio la Viña y la banda del tío Pringue llora.
Yo no
puedo estar sin ver el mar mucho tiempo, yo necesito esa expansión, ¿no?, que
te da el mar, ese poder respirar a gusto, a fondo…. Si se muere Paco de Lucía al lado del mar. El agua, el agua, el agua… Como el agua clara / que abaja del monte, / así quiero verte / de día y de noche
Adiós al sexteto y al cajón si se muere Paco de
Lucía. En cierta ocasión Corea le dijo: ‘Paco, salgamos de gira con mi banda y tú
tocas. O vamos con tu banda y yo toco. O sino, toca tú y yo bailo’. Si se muere
Paco de Lucía al lado del mar… No me lo
puedo creer. Todos estamos igual
Ha nacido una leyenda. Ha nacido una leyenda.