Nos van a crujir

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El pasado viernes, numerosos medios informativos se hicieron eco de la información procedente de Farmaindustria relativa a la cantidad, que los hospitales del Sistema Nacional de Salud, debían a las empresas farmacúticas por la compra de medicamentos. 

Símbolo de la Farmacia. Copa de Higia

(De Wikipedia)

La deuda total, que en 2011 asciende a 6.369 millones de euros, (un 36% más que en 2010). La información ofrecía también los días de retraso en el pago resultando, en 2011, una media de 525 días, (o sea casi año y medio), frente a los 390 días de 2010. La información se presentaba segmentada por comunidades autónomas. 


No se si hacen falta muchos comentarios; pero se me ocurren varios. Primero, el asunto es una barbaridad por el monto y por los retrasos en el pago y, además, parece que se ha salido de madre: el crecimiento en un año del 36% en la deuda y del 35% en el número de días de retraso en el pago así lo confirman.


Segundo, si esto se lleva a deuda por habitante, el resultado es de una magnitud, en algunas comunidades autónomas, que es para salir corriendo. La media, por habitante, está en unos 135 euros, pero hay comunidades que se van a más de 200 por habitante, como Castilla Leon y la Comunidad Valenciana; o a más de 300 como Cantabria. Tercero La deuda de dos comunidades, Andalucia y la Comunidad Valenciana, (que dan miedo, y no sólo por ésto), supone el 44% del total con datos de retraso en el pago de los más altos: 746 y 884 día respectivamente.

Símbolo de la Farmacia. Cruz Verde Griega

(De Wikipedia)

Finalmente, lo que presentan estos datos es la desvertebración de un país que, a la vista de la heterogeneidad de los datos, ya no es tal o, si quieren -por no ser pesimistas- va camino de dejar de serlo. ¡ Hay esta España de las autonomías y de la idiosincrasia y variedad de sus  pueblos!.


Y tanto. A la vista de estos datos, España está troceada en varios países diferentes. Es como mezclar bajo el mismo gorro a países o regiones, digamos, tipo Suiza o Renania-Palatinado con regiones o países decididamente tercermundistas, en los cuales te van a pagar un pedido casi dos años y medio después de haberlo suministrado.


Hemos hablado de mezclar bajo el mismo gorro, pero, ¿se pueden mezclar con el mismo interés de la deuda externa?. Aquí dentro, aunque hemos tardado, ya nos hemos dado cuenta y sabemos lo que hay. Pero fuera; ¿cuanto van a tardar en saberlo y en tomar las medidas pertinentes?. Si este tipo de cosas no se remedian pronto, nos van a crujir. 
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