La exposición (sic) "presenta una muestra significativa de los manuscritos del polígrafo canario, así como de sus ediciones príncipes, retratos, grabados de la época y materiales científicos, al objeto de dar difusión de la representatividad de su figura en el contexto de la cultura nacional del Setecientos."
En 1806 compuso un poema original en un canto y octava rima, titulado: Las bodas de las plantas, que ilustra sobre los diferentes modos de reproducción vegetal siguiendo las enseñanzas de Linneo. De él, se reproducen, a continuación sus estrofas iniciales.
Las bodas de las plantas (fragmento)
Canto único
1. Los desposorios de la amable Flora
Cantar en un vergel es mi deseo:
Templa su voz mi lira, y suave implora
Para el Epitalamio no ha Himeneo;
Sino al que la Botánica ya adora
Por Numen fiel, al inmortal Lineo,
Al primero que vio en las plantas todas
Los sexos, los amores, y las bodas.
2. El Reyno vegetal será su imperio.
Que soberanamente se dilata
Por uno y otro fértil hemisferio;
Donde el Árbol, Arbusto, Yerba, y Mata,
Bajo de su glorioso magisterio,
En un sistema de concordia grata,
Con Especies, con Géneros y enlaces
Forman Familias, Órdenes y Clases
3. Cualquiera Vegetable es un viviente,
Que nace, que digiere, que respira,
Que dá ciertas señales de que siente,
Que en busca del humor y del sol gira,
Que crece, duerme y suele estar doliente.
Que es macho, ó hembra, y engendrar conspira,
Que envejece, que muere, que reposa,
Y que deja una prole numerosa.
4. La Mimosa que afecta ser púdica
Y la flor de la Opuncia afestonada
Su sentimiento la una y otra indica
Al instante que llega á ser tocada:
La Caléndula, al alba pronostica
La lluvia en las alturas preparada:
Y D. Diego de noche no hace alarde
De señalar las cinco de la tarde?
5. De júbilo ó de duelo se reviste
Esta ó aquella Planta: En la Maldivia
La Flor del Sol de gala está ó de chiste
Por el dia no mas; pero se entibia
Apenas anochece: El árbol triste
En Góa está con pena, y no se alivia
Sino de noche; que en amaneciendo
Sus flores va cerrando, ó va escupiendo.
6. Considerad la indiana Musicapa,
Que cuando se le posa alguna mosca
Con pronta diligencia se la atrapa
Y su hoja en ella diestramente enrosca:
Mirad también la astucia y la surrapa,
Con que la Buenos-dias, planta hosca,
Al tocarla un viajante, lo saluda,
Dándole un golpe con su rama ruda.
….
José de Viera y Clavijo, (Los Realejos, Tenerife, 1731 – Las Palmas de Gran Canaria, 1813)
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